Sólo 9 días de lluvia y una racha de 47 jornadas sin una gota

Después de un invierno y una primavera especialmente lluviosos en la Montaña Palentina, las precipitaciones durante el pasado verano han sido más bien escasas. Entre el 1 de julio y el 30 de septiembre, tan solo nueve días se ha recogido agua en tres estaciones meteorológicas tomadas como referencia, las de Guardo, Cervera de Pisuerga y Aguilar de Campoo. Además, estos jornadas se centraron mayoritariamente en el mes de julio, y especialmente en la primera quincena.

No sólo fueron pocas las jornadas en las que hubo precipitaciones, sino que incluso hubo largas rachas sin una sola gota. La más importante de 47 días consecutivos, que se dio entre el 18 de julio y el 3 de septiembre. Es decir, que en todo el mes de agosto no se registraron lluvias por encima de 1 litro por metro cuadrado en 24 horas.

Además, en varias de esas ocasiones, el agua descargó de manera tormentosa. Es el caso de lo que ocurrió el 8 de julio en la zona de Guardo. Este fenómeno provocó la inundación de algunas calles y problemas derivados, como la entrada de agua en algunos comercios y portales. La lluvia comenzó alrededor de las 15.00 horas y durante 60 minutos han caído hasta 8,1 litros por metro cuadrado, según recogen los datos del observatorio metereológico de Cardaño de Arriba. La tormenta también tuvo importantes efectos en las temperaturas. De las 14.00 a las 15.00 horas los termómetros han caído en torno a once grados. De los cerca de 20,5 a la sombra hasta 8,1.

Según los datos que maneja la Confederación Hidrográfica del Duero, que tiene una gran red de estaciones por toda la Montaña Palentina, en los tres meses de verano se registraron 146,7 litros en Guardo, otros 40,6 en la zona del pantano de La Requejada (Cervera) y 48,1 litros en Aguilar de Campoo.