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Aparece el osezno herido de la cordillera Cantábrica, que ya está en el 'hospital'


El Gobierno de Cantabria ha capturado al osezno herido de la cordillera Cantábrica, en concreto de Liébana, tras dos meses de desarrollo del operativo de seguimiento. El ejemplar, que se encuentra en “buen estado”, salvo por la lesión en la pata delantera izquierda, y pesa 31 kilos, descansa ya en el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre (CRFS) de Villaescusa (Cantabria). Es el primer habitante de la nueva instalación para grandes mamíferos, que se inauguró el año pasado, pensada especialmente para osos pardos.
La Consejería de Medio Rural ha explicado que, gracias a la implantación de un sistema de cámaras de vídeo que están activas desde el 21 de noviembre, han podido seguir en todo momento la evolución del animal y localizar el “punto exacto” en el que los técnicos del Ministerio de Medio Ambiente colocaron la trampa lazo.
En concreto, el Gobierno ha señalado que, tras el seguimiento intensivo, se determinó la zona de querencia en la que además se ha estado poniendo comida para fijar al ejemplar. Ese trabajo previo ha permitido que, tras la colocación del dispositivo de captura por parte de los especialistas del Ministerio, se haya podido capturar al oso a las 18.05 horas de ayer.
Siguiendo el protocolo de actuación, los veterinarios del Centro de Recuperación anestesiaron al osezno con las “máximas garantías” para su salud y realizaron una primera monitorización en campo para comprobar que el animal tenía las constantes vitales correctas y que se encontraba en buen estado.
Hospital de Campaña
En segundo lugar, el operativo de Medio Natural, instaló en Tama, en una nave de la Consejería de Medio Rural, un ‘hospital de campaña’, donde le realizaron un estudio más exhaustivo y comprobaron el “buen estado” general del ejemplar. Asimismo, los especialistas le hicieron una primera cura en la herida que presenta en la extremidad izquierda que podría tratarse de una rotura, así como radiografías de la pata.
El consejero de Medio Rural, Pesca y Alimentación, Jesús Oria, ha subrayado que esta captura se ha conseguido gracias al “trabajo constante” desde el 21 de noviembre de los técnicos del Servicio de Conservación de la Naturaleza, los veterinarios del Centro de Recuperación, los guardas de la comarca de Liébana y, también en la última fase, de los expertos en trampeo del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente.
Oria ha señalado que, además de rehabilitar al animal, uno de los objetivos es conocer el origen de la herida del oso, y trasladar los datos a la Fiscalía de Medio Ambiente que ha estado informada desde el primer momento de todo el operativo.

Devolverle al medio natural con “garantías”
Por su parte, el director general de Medio Natural, Antonio Lucio, ha destacado que la recuperación se ha desarrollado siempre con la “máxima precaución”. En este sentido, Lucio ha explicado que la actuación se ha realizado con “gran cautela” para evitar crear una “alarma social innecesaria”, que pudiera afectar a la seguridad del propio operativo y del oso.
El director ha asegurado que “no habido falta de transparencia ni ocultismo”, sino un “trabajo magnífico” para recuperar al animal, recalcando que toda la información se ha trasladado tanto a la Fiscalía como a la Guardia Civil.

Asimismo, Ángel Serdio, el jefe de servicio de Conservación de la Naturaleza que ha dirigido la operación, ha reiterado que, además de recuperar la lesión del animal, el objetivo es que este pueda ser “liberado al medio natural con garantías”. En este sentido, ha indicado que la ventaja del nuevo recinto del Centro de Recuperación de Fauna Silvestre es que minimiza el contacto del osezno con los cuidadores y evita que el animal se habitúe a la presencia de personas. 

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