Sin noticias de la planta de biomasa de Forestalia en Guardo mientras echa a andar la del Bierzo

Esta semana ha comenzado a funcionar la planta de biomasa que la empresa de energías renovables Forestalia ha levantado en la localidad de Cubillos del Sil, en El Bierzo leonés. En estos momentos ya está introduciendo madera para que, en los próximos días, pueda empezar a generar electricidad. Se trata de la misma compañía que, casi al mismo tiempo, anunció que tenía la intención de abrir otra planta de características similares en Guardo. La diferencia es que, en el caso de la Montaña Palentina, no es que no se haya puesto la primera piedra de la industria, es que ni siquiera tiene los permisos necesarios.

Pese a la falta de noticias en los últimos meses, la Junta de Castilla y León ha reiterado en diversas ocasiones que el Gobierno autonómico sigue adelante con la tramitación. Por el momento, Forestalia no tiene los derechos de generación para poner en marcha el proyecto y está esperando que el Ministerio saque un nuevo concurso a subasta. En la práctica, esto podría ser algo positivo, porque mientras Forestalia consigue estos derechos de generación, el reloj no está parado y se avanza en los asuntos legales. La compañía anunció el pasado mes de mayo que el carecer de esos derechos de biomasa iba a ralentizar su llegada a la zona, pero confirmó que seguía adelante su intención de instalarse en la Montaña Palentina. Eso sí, no da plazos concretos, ya que todo depende de que se produzca la subasta Forestalia optará a los derechos.

El Ministerio de Transición Ecológica ha afirmado recientemente que tiene intención de realizar una nueva subasta a principios de 2020, dentro de su intención de impulso a las energías renovables. En este nuevo concurso, la Montaña Palentina podría verse beneficiada, porque la intención del Gobierno central es que criterios geográficos y económicos como el cierre de las centrales térmicas tengan un gran peso.

La multinacional de las energías limpias afirmaba que muestra de su compromiso con el proyecto de Guardo es que ya se están llevando a cabo la compra de los terrenos (casi medio millón de euros de inversión) para la construcción de sus instalaciones y también de la línea eléctrica que tendrá que evacuar la energía que se genere en el futuro. Lo que ocurre es que la falta de novedades ha hecho cundir el nerviosismo y el pesimismo en la comarca.

En la comarca de la Montaña Palentina se esperan noticias al respecto, pero no siempre la Montaña Palentina ha recibido con los brazos abiertos a los proyectos para generar energía eléctrica mediante la biomasa, es decir, mediante restos vegetales. En 1995, otra empresa proyectó en Salinas de Pisuerga la que estaba llamada a ser la mayor planta de este tipo de España, pero nunca se llevó a cabo. En un momento en el que este tipo de energía era ampliamente desconocida por la ciudadanía, la iniciativa empresarial generó un gran rechazo social con los argumentos de que esa industria provocaría "altos índices de contaminación en la ¡comarca, supondrá la pérdida de puestos de trabajo y generará descontento social en la zona".